Gene Wilder, uno de los actores más destacados de la comedia estadounidenses de los años 70, ha muerto a los 83 años. El jovencito Frankenstein, La mujer de rojo, Willy Wonka y la fábrica de chocloate son algunas de las películas más destacadas de su currículo.
Para entender el significado de Gene Wilder, lo mejor es entender cuál fue la familia artística en la que creció. Wilder, como muchos otros actores de su época, tuvo el padrinazgo de Mel Brooks, el gran cómico de la generación anterior y el hombre que lo eligió para El jovencito Frankenstein, Sillas de montar calientes y Los productores. Humor absurdo, teatral, bonito más que agudo… Por ese camino creció la carrera de Wilder.
Otro nombre destacado: Arthur Hiller, el cineasta de Love story, fallecido también este verano. Hiller tuvo la idea de emparejar a Wilder con Richard Pryor, un cómico de raza negra con el que Wilder interpretó el eterno juego de los contrarios: el judío y el negro; el cándido y el pícaro, el bueno y el chulo. Juntos protagonizaron películas como El expreso de Chicago y No me chilles que no te veo, las películas de más éxito de público en la carrera del actor.
Después, su carrera fue aterrizando. Hizo La mujer de rojo, más recordada por la banda sonora que por su historia, se casó, escribió libros y se retiró del cine en 1998. Su cara nunca dejó de tener un extraño y chistoso ángel.