Según el diario mexicano Basta!, la fortuna que dejó el cantante Juan Gabriel, está en riesgo.
Eso porque de las más de 70 casas que compró el fallecido artista, muchas de ellas no están a su nombre, para evitar problemas con el fisco, y ahora esas propiedades siguen ocupadas por sus ‘prestanombres’.
La publicación señala que algunas de esas casas están a nombre de su amiga y manager Silvia Urquidi, y otras tantas a nombre de uno de sus ayudantes llamado Romero, además de la casa con estudio de grabación que Juanga construyó en los terrenos de los dueños del Hotel Dorado en La Riviera Maya.
No se sabe todavía que pasará con ese patrimonio.