Dada la reacción desatada sobre la presunta negativa del gobierno cubano de comprometerse en el traslado de los restos del primerísimo actor cubano Reynaldo Miravalles, residente en los Estados Unidos hace muchos años, pero a quien lo sorprendió la muerte mientras se encontraba de visita en Cuba, numerosas voces se han alzado en protesta por tal negativa.
Sin embargo, fuentes de primera mano, vinculadas al artista, a su familia en la Habana y al Ministerio de Cultura, aseguraron a este redactor que las autoridades del país se habían brindado desde el primer momento en asumir todos los gastos, tal y como hicieron con el hospedaje de los familiares y el tratamiento médico recibido.
Al parecer la información de que “pedían 10 mil dólares” no tiene una base firme, es injusta y tergiversada, confesó a este redactor una fuente, haciéndose eco de una conversación sostenida con un alto funcionario del Ministerio de Cultura y una primerísima figura del Cine y la Televisión cubanas.
Mientras, se supo que la Embajada de los Estados Unidos en la Habana decidió asumir los gastos del traslado de los restos del artista desde la Habana a los Estados Unidos, en sentida muestra de respeto a un hombre que brindó arte de primerísimo nivel y compartió escenas con los más grandes actores y actrices de su época, no solo cubanos, sino también norteamericanos, como sin dudas lo es Harvey Keitel, con quien trabajó Miravalles en el filme “El Misterio Galíndez”, actuación que le hizo arrancar al diario español ABC la siguiente declaración: