Abona 60.000 euros para la víctima y el juez impone una condena de 18 meses de prisión aunque no ingresará si va a cursos de sensibilización de género
El juez ve delito de lesiones y contra la integridad en la patada de la Diagonal
La broma le pudo salir aún más cara. Mario Garcia Montealegre el autor de una patada a una mujer en la Diagonal de Barcelona en febrero de 2015, fue grabado por un amigo y después lo difundieron por las redes sociales se ha conformado con una pena de 18 meses de cárcel por un delito contra la integridad moral y otro de lesiones con el agravante de alevosía y discriminación por sexo. En una vista celebrada en el Juzgado Penal número 25 de Barcelona, el autor y su amigo, ambos procesados, admitieron los delitos y explicaron que habían abonado 60.000 euros en concepto de indemnización de la víctima, que estuvo 75 días de baja por esta agresión.
En concreto, en el vídeo se puede ver a García propinar una fuerte patada a una mujer antes de cruzar un semáforo por lo que la víctima cayó al suelo y sufrió un esguince, hematomas en la rodilla y muñeca izquierdas y dolor en las cervicales. La sentencia, que es firme, obliga también a los condenados a asistir a un curso de sensibilización de género y a otro de prevención de comportamientos violentos. Tampoco podrán acercarse a la víctima y le deberán pagar 48.000 euros de indemnización. por los daños físicos y morales, cantidad que pedía la Fiscalía.
El escrito de acusación remarca que el acusado “contó marcha atrás con los dedos de su mano” y “emprendió veloz carrera” hacia dos mujeres hasta propinar una “brutal patada” a una de ellas. Lo hizo “inclinando su pierna” para “disponer de más fuerza y poder impactar con más energía en el tobillo” de la víctima. La mujer cayó “derrumbada fulgurantemente al suelo” entre las “carcajadas” del agresor y su amigo que lo grababa con el teléfono móvil.
En un principio, la Fiscalía pedía tres años de prisión para García, natural de Talavera de la Reina, y para el otro procesado ya que consideraba que actuaron con “el afán de humillar y ridiculizar a una mujer por el hecho de serlo”. El Ministerio Público remarcó que hubo importantes daños morales por la “difusión indiscriminada y masiva” del vídeo en internet y medios de comunicación y detalla el “estrés postraumático” que sufre la víctima por esta agresión, lo que aumenta su “desconfianza a las intenciones de los otros, rabia por la incomprensión de la violencia gratuita y no sentirse ayudada”. Tras tener en cuenta la aceptación del delito y el pago de la indemnización, el juez les condenó a una pena a 18 meses de cárcel por lo que los procesados no ingresarán en prisión siempre y cuando no delincan y acudan a los cursos. Además obliga a retirar el vídeo de las redes sociales.