Si miran al cielo entre el 12 y el 13 de agosto por la noche podrán apreciar uno de los fenómenos más bonitos del año. La lluvia de meteoritos conocida como “las lágrimas de San Lorenzo” o las “Perseidas” alcanzará su mayor intensidad durante esas noches, que es cuando la Tierra y la cola del cometa Swift Tuttle , que orbita al Sol cada 130 años, se crucen.
Si el cielo lo permite y las nubes no son demasiado espesas, el mejor lugar para admirar este fenómeno será alejado del centro urbano de las grandes ciudades, en una zona oscura y lejos de edificios, árboles u otros elementos que dificulten la visión del cielo. Además, es recomendable evitar la luna. Se calcula que este año se podrán ver alrededor de 100 estrella fugaces por hora.